Por muchos años, los fabricantes de elevadores nos han engañado a todos con el objetivo de no hacernos sentir culpables.
Te ha pasado que llevas prisa y cuando te subes a un ascensor, para apresurarlo presionas el botón de «Cerrar la Puerta» y no funciona; entonces comienzas a presionarlo varias veces y de todos modos se cierra a la misma velocidad a la que está programado.
Resulta que luego de haber realizado un estudio con varios fabricantes de elevadores, se descubrió que el botón de «Cerrar la puerta» en el elevador no es tan funcional como siempre has creído.
Se descubrió que desde la década de los 90, este botón en la mayoría de elevadores ha sido obsoleto. Esto es por que se descubrió que las personas siempre necesitan sentir que tienen el control en su vida diaria. Por decir así, los fabricantes lo instalaron solo para hacernos sentir mejor.
Si realmente funcionara, las personas con alguna discapacidad física serían las más perjudicadas ya que no les daría el tiempo necesario de entrar al elevador.
Pensémoslo de esta manera, cuando presionas solo una vez el botón de «Abrir la Puerta«, esta se abre más rápido que lo normal, mientras que el botón para cerrar, lo debes presionar 100 veces y de todos modos cierra a la misma velocidad que siempre.
¿Crees tu que hemos vivido engañados?