«Stella» se convirtió en una de las tormentas de nieve que más fuerte ha azotado la costa este de Estados Unidos en los últimos años.
En los últimos días, varios estados de la parte este en el país norteamericano experimentaron nevadas entre 15-20 centímetros y ráfagas de fuertes vientos de hasta 90 kilómetros por hora.
Esta fuerte tormenta llegó a paralizar por completo grandes ciudades como Nueva York, Nueva Jersey y Filadelfia con su manto blanco. Esto significa que más de 31 millones de habitantes fueron afectados por la tormenta.
Los aeropuertos de Nueva York como el JFK, La Guardia y Newark, indicaron que más del 80% de sus vuelos programados tuvieron que ser cancelados. Esto representa aproximadamente 7900 vuelos nacionales e internacionales.
En las ciudades afectadas, el transporte público funcionaba, pero con un servicio reducido al mínimo, por lo que varios negocios tuvieron que cerrar y los trabajadores se quedaron en sus casas.
La buena noticia es que esta tormenta no fue tan fuerte como la histórica tormenta «Jonas» que golpeó la costa este en enero del 2016 y la cual dejó más de 70 centímetros de nieve en las calles y casi 20 muertos.