Peleas con tus padres. Somos humanos y no somos perfectos, y es fácil que podamos estar en desacuerdo con cualquier persona incluso con nuestros seres queridos. Pero hay veces en las cuales, un desacuerdo puede terminar en una pelea y en el caso de pelear o tener una discusión con tus papás el resultado suele ser doloroso para ambas partes.
Sin importar que parte tiene la razón, es una situación difícil, porque es complicado en muchos casos, entender el punto de la otra persona o ponerse en sus zapatos. Muchos conflictos se dan a raíz de la mala comunicación, los malos entendidos y los supuestos que se llegan a creer. Aun teniendo la razón, podrías equivocarte en la forma en que manejas la situación, pues no importa si estas en lo correcto, puedes arruinarlo si no sabes cómo controlar tus emociones y sentimientos.
Estar en desacuerdo no es malo, el problema es llevarlo más allá, o tener constantes conflictos. Si has peleado con alguno de tus padres, o tienes conflictos constantes, intenta comprender los hechos que han desencadenado la situación, trata de dejar de lado los sentimientos volátiles, sé comprensivo y objetivo, necesitas aclarar tu mente para empezar a entender el panorama completo.
La emoción impulsiva
Muchas veces, la emoción del momento nos hace decir y hacer cosas que no quisiéramos, de igual forma, muchas veces nos harán lo mismo, lo más importante es cultivar la templanza y madurar, es necesario empezar a ser fuerte emocionalmente y paciente sin permitir que las emociones tomen el control pues no vale la pena iniciar un conflicto sin razón.
Si has fallado pide perdón, si te han fallado perdona, el orgullo es un sinsentido que solo pone una barrera entre dos personas que se quieren. No dejes que los sentimientos negativos te invadan y que empañen todo aquello positivo que con el tiempo se ha construido.
Los conflictos nos ayudan a crecer, enfréntalos, no los ignores o trataste de escapar, aprende a resolverlos para ser una mejor persona día a día, pero hazlo con sabiduría, prudencia y amor.
