*Foto de portada vía StarTribune
Muchos jóvenes son subestimados en su área laboral por su edad. Especialmente, si son un médicos. Ante esta situación el doctor Erik Bostrom de Aitkin Minnesota (EE.UU.), decidió ganarse la confianza de sus pacientes regalándoles algo muy especial: una manta para sus bebés recién nacidos.
Erik Bostrom, de 34 años, es un ginecólogo estadounidense que le estaba costando tener pacientes porque asociaban su edad con inexperiencia. Una enfermera le recomendó que le hiciera algo especial a sus pacientes para darles confianza y fue así como comenzó a cocer mantas.
«He cosido a muchas heridas en la gente, mucha piel», dijo a StarTribune. «Pero nunca cosí tela». Con la ayuda de su mamá, su cuñada y YouTube, Erik aprendió a cocer y por tres años ha entregado mantas personalizadas a todos los bebés que ha traído al mundo.
Las mantas están bordadas con el nombre, el cumpleaños, el peso y la altura del bebé. «Hace cuatro años, si me hubieras dicho que cosería regalos para la gente, me habría reído de ti», dijo.
«Gran parte de mi tiempo lo paso cuidando a ancianos y enfermos, pero cuando nace un bebé, en lugar de la tristeza y las dificultades, las personas están llenas de alegría y emoción. Es una parte realmente genial de la medicina «.
Doctor Erik Bostrom