La situación no ha sido fácil para muchos trabajadores guatemaltecos que salen todos los días a vender en las calles. La mayoría se han visto gravemente afectados por la pandemia del COVID-19 debido a las medidas preventivas que se han establecido para velar por la salud y seguridad de todos.
Entre los vendedores ambulantes afectados se encuentran los vendedores de helados. Motivados por su situación, Grupo Lala y sus colaboradores han decidido unirse y crear un fondo de donaciones monetarias para comprar insumos básicos y dárselos a este grupo de heladeros.
«Estamos entregando 42 mil raciones de alimentos, gracias a esta iniciativa y
a la enorme voluntad de compartir», indicó Ana María Orozco, Gerente General de Lala para Centroamérica, a través de un comunicado de prensa.
A pesar de que los vendedores no son empleados directos de Lala, la compañía buscó la forma de ayudarlos durante esta crisis sanitaria. Del total de las donaciones de los colaboradores, la empresa Lala duplicó este fondo para lograr impactar a un total de 1,000 familias de heladeros ambulantes.
«Sabemos de la lucha constante que tienen los heladeros ambulantes en esta situación. Que no se sientan solos porque juntos como guatemaltecos saldremos adelante», mencionó Mynor Castro, Supervisor de Ventas Lala en Zacapa, Guatemala, que formó parte de los colaboradores que donaron para esta iniciativa.