Cada año es lo mismo, escribes, piensas y lo hablas con tus familiares y amigos de todos los propósitos que quieres lograr al comienzo de un nuevo año. Trata de seguir estos pasos y más de uno de tus sueños vas a lograr.
Para iniciar los siguientes pasos tienes que hacer un examen de conciencia que tanto cumples las promesas en tu vida, pero las promesas hacia ti o ¿eres de los que cumples las promesas hacia otros y para ti no hay nada?.
Ok, si hiciste un análisis de qué tanto te cumples tus promesas, entonces ahora puedes ver los siguientes puntos. Esto lo hacemos así porque tienes que entender que tú mereces lograr tus sueños y tienes que hacer un esfuerzo por cumplirlos.
PASO 1: Piensa en propósitos que realmente necesitas y vas a lograr en 12 meses
Que queremos decir con esto, aterriza lo que realmente quieres lograr, por ejemplo, quieres adelgazar, entonces empieza con establecer cuántas libras deseas reducir y por qué lo quieres hacer. La siguiente pregunta es cómo vas a lograr bajar de peso?: dieta, ejercicio, no comer pan, ir con una nutricionista, en fin deben de haber acciones muy puntuales que debes de establecer para tu meta.
Paso 2: Descarta propósitos que no necesitas de manera inmediata
No sirve de nada que te pongas propósitos que sean muy pero muy difíciles de lograr o que no sean necesarios en este momento. Por ejemplo estás pagando la deuda de tu carro, pero sueños con irte de viaje por toda Europa, pues tu propósito debería ser pagar lo antes posible tu carro. Las acciones pueden ser: abonar a capital, buscar hacer ingresos extras, etc.
Paso 3. Escoge pocos y limítate a ellos
Es un año pero no dispones de todos los días. El día a día te comerá una parte importante de tu tiempo y otros proyectos más cortos o imprevistos ocuparán también espacios. ¿Cuál es la idea entonces? Que asumas que no puedes con todo. Di no a ciertas cosas que te gustarían pero son secundarias y enfócate en pocos objetivos muy claros y muy relevantes para ti.
Paso 4: Define cada objetivo claramente
“Más salud”, “Comer más variado”, “Dormir más” son ejemplos perfectos de propósitos mal definidos. Los anteriores valen como idea inicial pero necesitarás decidir cuál es tu prioridad dentro de “Más salud”, necesitas trazar la línea clara tras la cual considerarás que el objetivo está cumplido. Si no conoces la meta no puedes llegar a ella.
Paso 5: Lista los beneficios que esperas
La definición de un objetivo a veces no es directamente lo que esperas. Por eso aparte de la definición (la frase que lo resuma, por ejemplo: Salir a correr 52 días en todo el año), necesitas listar lo que pretendes con ello. En este caso podría ser, “mejorar mi forma física” y “fatigarme menos en el día a día”. Como ves estas no son medibles por lo tanto no sirven como objetivo.
Paso 6: Realiza un cronograma para organizar tu tiempo y los recursos que necesitas
Puedes realizar un plan en una hoja y tener claro que vas lograr por mes o si lo quieres más a detalle por semana. Esto te servirá para llevar el control de tus propósitos en el año.