Actualmente, las redes sociales son parte de la vida cotidianas de muchísimas personas en el mundo. Son varios los aspectos positivos que podemos lograr a través de ellas y van desde contactar a una amistad que teníamos mucho de tiempo de no saber sobre ella, como llegar a conseguir un empleo, sin embargo, como cualquier cosa, también tienen su lado negativo.
Donde hay un bien común y un avance para la sociedad, también existe un lado obscuro que le hace sombra y produce una serie de amenazas y consecuencias a las que se le debe hacer frente para no causar un mayor daño. En este aspecto, las redes sociales en sí no son el problema, pero sí su utilización para fines indignos o dañinos para terceras personas.
Amenazas y consecuencias de las redes sociales:
Ahora que ya se tiene una perspectiva sobre el impacto y recorrido que han tenido las redes sociales, se pueden determinar una serie de puntos para reflexionar para analizar cómo se les pueden enfrentar.
- Phishing: Robo de contraseñas para manipular o alterar datos personales y espiar a las personas.
- Adicción al ecosistema social media: El hecho de estar todo el tiempo conectados hace que muchos usuarios no sepan vivir sin saber cuántos followers tienen, si alguien ha comentado sus fotos o sí alguna publicación ha recibido más visitas. Estos casos, por lo regular, se dan más en la juventud.
- Cyberbulling: El acoso que es llevado a cabo por compañeros de clase.
- Cybergrooming: Casos donde los adultos buscan conectarse con menores.
- Potencia nuestros niveles de estrés: La velocidad de los acontecimientos hace subir el ritmo de vida provocando cuadros de estrés severos.
- Aislamiento de las personas: Al final se acaban dando situaciones en las que algunas personas son más hábiles socialmente en internet que cara a cara. El ser «protagonistas» en las redes les puede hacerse sentir cómodos y olvidar a sus contactos y amistades no digitales.
Una de las consecuencias más importantes es que todos les estamos dando mucho poder a empresas como Google, Facebook o Twitter. Las políticas de privacidad cada vez tienen que tener más importancia, ya que estamos mucho tiempo en ellas y publicamos mucha información personal.