Existe un gran mito con respecto al uso de la tecnología móvil y la posible relación con el cáncer. El oncólogo Gary Larson, especializado en terapia con protones y con 30 años de experiencia tratando a pacientes de cáncer, ha publicado recientemente su opinión acerca de este mito.
El WiFi y por lo tanto los teléfonos móviles, funcionan en un rango de entre 2 y 5 Megahercios del espectro electromagnético. Esto quiere decir que, las ondas de radiofrecuencia que emiten equivalen un poco más a las que utiliza la televisión.
Actualmente no existe evidencia científica que demuestre que la radiofrecuencia tenga consecuencias negativas para la salud y tampoco hay pruebas que afirmen esa relación.
Según lo que afirma el oncólogo Gary Larson, los tumores malignos provocados por radiación pueden llegar a desarrollarse en 20 años consecutivos de su exposición, pero hoy en día, de millones de personas expuestas a radiación cerebral, sólo se conocen 73 casos que registraron tumores en todo el mundo. Incluso cuando estos tipo de tecnología tiene cerca de 20 años alrededor de todas las personas y en ese período los casos de tumores a penas han variado.
“Teniendo en cuenta que los usan billones de personas, si hubiera habido alguna correlación ya habíamos tenido evidencias de ello”.