*Foto de portada vía African Travel Guide
En Stellenbosch, Sur África, existe una granja vinícola que en lugar de utilizar químicos para alejar a las pestes de las uvas, utiliza cientos de patos como pesticidas naturales. No solo es mejor para la economía de la granja, sino que es mucho más amigable con el ambiente.
Según Peter Stuart, el Gerente administrativo de la Granja Vergenoegd, los patos han mantenido los viñedos libres de caracoles por más de 30 años. «Los caracoles arruinan las ramas de los viñedos y los patos se comen los caracoles», comentó Denzel Methys, experto en patos, a Great Big Story.
«Los pesticidas son peligrosos para el medio ambiente. Los patos no son peligrosos, son controladores naturales de las pestes en la granja», dijo Denzel.
Todos los días Denzel se encarga de cuidar y criar a los patos, de alimentarlos y de realizar el famosos «festival de patos» que caracteriza muchísimo a la granja. «Hacemos como un ‘festival de patos’ en donde todos los patos marchan en línea recta y luego los mando a trabajar a los viñedos», explicó Methys.
En la Granja Vergenoegd hay 1,071 patos trabajando en los viñedos y alrededor de 300 patos reproductores.
«Los patos son muy cercanos a mí. Me miran como su mamá porque los cuido todos los días y me comunico con ellos. Los patos no son solo patos, tienen un propósito», resaltó Methys.