Desde su llegada, los drones han marcado une tendencia en el mundo de la fotografía y para los amantes de los aviones a control remoto ya que se pueden utilizar para eventos sociales, conciertos, eventos e incluso películas.
Hace algunos meses los drones invadieron cielos de importantes ciudades, ante ello la Administración Federal de Aviación proclamó ilegal volar estos artefactos con fines comerciales.
Ante este decisión los drones tuvieron que regresar a sus cajas; sin embargo, el aventurero fotógrafo Amos Chappe decidió romper reglas y retratar lugares prohibidos desde los cielos.