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Los tatuajes no disminuyen su capacidad como médico

octubre 23, 2019
Historias de jóvenes
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*Foto de portada vía Instagram Sarah Gray (@rosesarered_23)

 En un mundo en donde la medicina y los tatuajes no van de la mano, Sarah Gray está demostrando lo contrario. Sarah ha sido nombrada como «la doctora más tatuada del mundo» y está mostrándole al mundo que su apariencia no la hace menos capaz.

Sarah Gray vía Instagram Sarah Gray (@rosesarered_23)

Sarah Gray forma parte del mejor equipo de médicos de Australia, pero es mejor conocida por sus tatuajes que por sus capacidades. A pesar de su apariencia, Sarah ha logrado destacar como médico en el Hospital Royal Adelaide, en Australia, y se está especializando en cirugía ortopédica. 

Sarah Gray vía Instagram Sarah Gray (@rosesarered_23)

«Cuando estoy en el trabajo, no me tratan de manera diferente por ser colorida. Mis pacientes y los médicos principales me tratan justamente y no me juzgan mi apariencia la mayoría de veces», escribió en Instagram.

Sarah Gray vía Instagram Sarah Gray (@rosesarered_23)

 Lastimosamente, Sarah sí ha sido juzgada por sus tatuajes afuera del hospital. Le dijo a The Daily Mail Australia que el año pasado la sacaron de restaurantes y se negaron a atenderla en algunas tiendas por su apariencia, algo que la frustra muchísimo. 

Sarah Gray vía Instagram Sarah Gray (@rosesarered_23)

La Dra. Gray ha difundido su historia en las redes sociales para hacer conciencia sobre los tatuajes en el área laboral. «Si eres seguro y competente en tu trabajo, realmente no debería importar cómo te vez», dijo a Sunrise.

Sarah Gray vía Instagram Sarah Gray (@rosesarered_23)

Además de ser doctora, Sarah es dueña de un estudio de tatuajes llamado «The Grim Raptor», junto a su esposo Matt, un artista de tatuajes. 

Sarah Gray vía Instagram Sarah Gray (@rosesarered_23)

Sarah menciona en diversos medios que nunca se  tatuaría algo ofensivo. «No tengo nada ofensivo en ninguna parte de mi cuerpo y creo que hay una diferencia entre hacerse un tatuaje de mala calidad y hacerse un tatuaje si eres un coleccionista de arte como yo», dijo.

El mensaje principal que Sarah Gray está difundiendo con su experiencia es no podemos juzgar la capacidad de las personas por su apariencia física.

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