Ser mamá es una experiencia que deja el léxico de cualquier idioma escaso porque es algo que no se describe, se vive. Existen mujeres que tienen en su plan de vida volverse madres. Este no fue el caso de Andrea Palma, quien tras haber sido víctima de una violación se encontró en un debate interno: ¿Me vuelvo mamá o aborto?
Fue drogada por un «amigo»
Andrea Palma asistió a una fiesta con su mejor amiga, en donde se encontró a un amigo de la iglesia. Al ver que no estaba tomando nada, le ofreció una bebida alcohólica y ella, por la confianza que le tenía tras cinco años de amistad, la recibió. «Lo último que recuerdo es ese trago. Nueve horas después amanezco [desnuda] al lado de una persona que no conozco,» comentó la joven durante una entrevista en El País de los Jóvenes.
Con muchísimas llamadas perdidas en el celular, cansancio y confusión, Andrea salió del apartamento donde se encontraba y fue recibida en su casa con regaños. «Yo no reaccionaba; me quedaba callada,» mencionó.
«Lo primero que pensé fue: ‘Que vergüenza contarlo y decir ‘no sé que pasó’. Entonces, lo que hice fue ocultarlo. Mi familia estaba preocupadísima.»
Al día siguiente, cuando se bañó, descubrió que tenía golpes y rasguños en todo el cuerpo. «Ahí fue cuando me asusté un montón y como el miedo paraliza, no hice nada,» comentó Andrea.
La prueba de embarazo salió positiva
Andrea consideró tomar una pastilla del día después, pero no lo hizo porque estaba en negación y creía en la posibilidad de que su violador haya utilizado un anticonceptivo.
Aun no se atrevía a aceptar que lo que le había sucedido había sido una violación, hasta que habló con un amigo, quien no la vio bien, y por fin logró contarle a alguien lo sucedido. «Lo que pasó fue que la violaron. No fue algo que usted dijo ‘sí [tengamos relaciones]’; usted nunca tuvo ese sí,» le dijo.
Cuando por fin se hizo la prueba de embarazo «casera», le salió positiva. Manteniendo la esperanza de no estar embarazada, inmediatamente solicitó un examen de sangre, el cual le confirmó lo que tanto temía.
«No sabía qué hacer ni cómo afrontarlo.»
«¿Vas a abortar?»
La reacción de su madre fue espectacular; fue un apoyo para Andrea durante esta fuerte trayectoria. Con urgencia la llevó con un ginecólogo, el cual confirmó que los síntomas que sufrió fueron causados por la droga (que a la fecha es desconocida) que ingirió.
«¿Vas a abortar? Yo soy pro vida, no te lo voy a hacer, pero tenés la opción por cómo pasaron las cosas. Pensálo,» le dijo el doctor. Su madre no interfirió en su decisión, Andrea debía decidir por sí sola.
Descubre qué decidió Andrea Palma
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Organización Sí a la vida: «Brindamos ayuda a mujeres que se enfrentan a un embarazo inesperado y que, por diferentes motivos, están en situación de riesgo.»
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