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Carlos, un padre guatemalteco cuyas hijas fueron víctimas de abuso infantil y de los defectos del sistema judicial de Guatemala, pasó un año entero pidiéndole a Dios un milagro para rescatar sus pequeñas de sus abusadores. Sin embargo, nunca se imaginó que su hija mayor experimentaría una aparición divina de la Virgen María Auxiliadora.
«Ese año no dejaba de pedir cada día y a cada momento un milagro, le hablaba a Dios, a Jesús y a la Virgen María Auxiliadora», mencionó Carlos al contar su testimonio.
Las hijas de Carlos fueron víctimas de su propia madre, quien permitió que otras personas abusaran de ellas. Al momento de buscar protección legal, el guatemalteco se enfrentó a lo que muchos padres como él se enfrentan en el país: un sistema que no escuchó a dos niñas que pedían auxilio.
«Pasé un año sin ver a mis hijas, era un dolor enorme saber que las habían regresado con los abusadores, aún con todas las declaraciones de mis hijas», relató el padre.
Carlos tenía la certeza de que Dios lo iba a ayudar y fue así como el 9 de junio del 2017 sucedió un milagro. La hija mayor de Carlos logró escaparse de la casa en donde su madre la encerraba con llave junto a su hermanita.
«El 9 de junio de 2017 en la tarde mi hermana me llama porque encuentra en la calle a mi hija pequeña; a sus 9 años mi hija había logrado escaparse de su agresora y de todos los involucrado», contó Carlos.
Cuando Carlos se reencontró con su hija le preguntó entre lágrimas cómo había logrado escaparse y ella le dijo:
«Siempre nos encerraba con llave, vi que no lo hizo ese día y me salí, pero en la esquina de la casa no sabía qué hacer; me puse a llorar y en ese momento me tocaron la espalda, volteé y era la Virgen María», explicó la pequeña. «No me dijo nada, sólo me tomó de la mano y me llevó por varias cuadras hasta que vi el carro de mi tía , en ese momento me soltó y ya no la vi.»
Gracias a este milagro, Carlos logró recuperar a sus hijas y, a pesar de que ha sido un proceso complicado de varios años, las pequeñas se encuentran bajo la protección y el amor de su padre.
El Día de la Virgen María Auxiliadora fue constituido por el papa Pío VII el 24 de mayo de 1814, luego de su regreso a Roma tras haber estado en cautiverio en Francia por órdenes de Napoleon I. De esta forma, estableció la fecha para agradecerle a la Virgen por protección del pueblo cristiano contra los moros, turcos, herejes y detractores de la cristiandad.
A María se le considera el auxilio de los cristianos, por lo que cada 24 de mayo se venera esta cualidad de la Virgen como protectora. Así mismo, se conmemora los milagros que, a través de distintas apariciones de la Virgen, han cambiado la vida de muchas personas en todo el mundo, como la de Carlos y sus hijas.
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