Uno de los problemas ambientales más frecuentes es la contaminación de los ríos y lagos. Por años el río Sena en Francia ha sido víctima de la polución y en 1960 fue considerado «muerto» desde el punto de vista biológico. Sin embargo, un niño de 10 años llamado Raphaël mantiene la esperanza de salvarlo y con lo que tenía ideó un plan para limpiarlo.
La esperanza es algo innato en todos los niños y por ello, muchos de ellos nos sorprenden con iniciativas increíbles como la de Raphaël. El pequeño francés le pidió el año pasado a sus padres como regalo de Navidad ganchos, guantes, cuerdas e imanes para poder sacar chatarra de las profundidades del río Sena.
Al enterarse del plan de su hijo, los padres de Raphaël decidieron apoyarlo para pudiera lograr su objetivo. Todo el año 2020, el pequeño ha estado sacando basura del río durante los fines de semana.
Raphaël dio a conocer a través de una entrevista con un medio local que entre las cosas más raras que ha sacado se encuentran bayoneta de 1874, una urna funeraria y una motocicleta Yamaha de 250 kilogramos. Las bicicletas y las motocicletas son de las cosas más frecuentes que saca del Sena.
El francés comparte su iniciativa a través de Instagram y publica fotos de muchos de los objetos que ha sacado del río. Poco a poco su historia ha salido a luz y ha recibido ayuda por parte de instituciones del gobierno, organizaciones y activistas.
Es increíble lo que se puede lograr con disciplina y trabajo, pero sobretodo con esperanza. Raphaël nos enseña que no se necesita mucho para ayudar al ambiente; hay que tener el deseo y tomar acción.