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*Foto de portada vía Univisión
Durante el mes de noviembre, el huracán Eta causó muchos daños en Centroamérica. Honduras fue uno de los países más afectados, con muchas comunidades damnificadas por ríos desbordados. Como fue el caso de la Colonia Planeta, en La Lima, donde el río Chamalecón causó daños severos.
Muchas familias hondureñas perdieron sus hogares, sin embargo gracias a la inmensa bondad de algunos ciudadanos, tuvieron un lugar donde refugiarse.
A pesar de que no tienen mucho que ofrecer Wilson Varela y su esposa, Evelyn Flores, le abrieron la puerta de su hogar a siete familias afectadas por el huracán Eta.
La pareja hospedo a Carlos Franco, su esposa Nohemy Portillo y sus dos hijos, luego de que perdieron su casa. No podían creer la terrible situación en la que se encontraban estos vendedores de dulces con dos niños pequeños y decidieron ayudarlos.
“Los vimos a ella, a la tiernita, tirada en el suelo, monte y todo eso. El peligro de un animal que la picara. Ellos sin ropa, en chancletas, sin nada solo con lo que andaban puesto (…) bamos de champa en champa, gritando y preguntando por ellos. Teníamos miedo de no hallarlos vivos (…) El agua estaba hasta el tope de las casas, no sabíamos para dónde agarrar. Emocionalmente eso fue preocupante, porque miraba pasar refrigeradoras por el agua, pasaron animales y uno solo esperaba ver las caras de las personas”, relato Varela a Univisión.
Para la pareja la ayuda paró ahí, No solo ayudaron a la familia Franco, también hospedaron en su humilde vivienda a seis familias más, ayudando a un total de 12 adultos y 23 niños.
Con lo poco que tenían, les dieron techo y comida a muchas personas que estaban en un momento de gran necesidad.
“No soy adinerado, pero con lo poquito que tenemos estamos ayudando. No da el que tiene sino el que tiene voluntad”, expresó Varela, quien se gana la vida con un negocio de venta de frutas y comida.
También ayudaron a sus propios familiares, quienes no tenían colchones donde dormir. “Aquí no estamos debajo del agua, del lodo, nada que ver, y por lo menos estoy donde ella [su recién nacida] esté tranquila. Tiene su camita, yo la acuesto tranquila y no hay problema de nada”, dijo Nohemy Portillo.
