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En la vida siempre hay cosas que no salen como se quería. Es por eso que demostrar la molestia mediante una protesta o queja es muy común en las personas. Sin embargo, cuando esta queja no deja nada positivo puede llevar a la persona a vivir en constante negatividad. Conoce aquí los tipos de queja, las consecuencias que tiene y cómo dejar de quejarse por cosas inútiles.
Decir NO a ciertas situaciones, es una muestra de alta autoestima y madurez. Por ejemplo, cuando no te llevan la comida que pediste o alguien no cumple con su trabajo. La queja en esta situación será positiva y en pro de un cambio para mejorar.
El deshago es una forma de aliviar la presión que se acumula en una situación fuerte. Desahogarse es una buena manera de lidiar con el problema mientras se presenta con el fin de encontrar una solución a este. Sin embargo, cuando este desahogo no lleva a tomar acción y afrontar el problema, esta queja se convertiría en una protesta sin sentido.
A diferencia de las dos anteriores, esta queja está dirigida hacia cosas en las que no se tiene control. Como quejarse del clima, la situación económica u otras problemáticas. Esta queja no busca solucionar nada y genera un estado mental de expectativas bajas.
La queja negativa cuando se presenta con mucha frecuencia, limita a las personas a la capacidad de experimentar placer y los sumerge en un estado de ánimo negativo. Esto hace que la persona se sienta mal y se sienta incapaz de afrontar el problema.
Para combatir la queja inútil o negativa lo primero que debes hacer es cambiar tu actitud y empezar a vivir con gratitud. Si cambias tu enfoque de lo malo de una situación y te centras en aquello que te genera bienestar, será más fácil experimentar una emoción positiva de agradecimiento por todo lo bueno que sí ocurre en tu vida.
