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La hiperautomatización es una de las tendencias más importantes en el mundo de la transformación digital. Pero, ¿por qué es relevante hablar de innovación en las corporaciones en estos momentos? Porque la tecnología es la mejor aliada para que las empresas, de todos los tamaños, evolucionen y se mantengan vigentes.
De acuerdo con un estudio realizado en el 2020 por el Instituto de Finanzas Internacionales y Deloitte, las acciones para la digitalización fueron clave para que las organizaciones se volvieran más resistentes ante los cambios provocados por la pandemia. Asimismo, un informe de la consultora KPMG determinó que el 80% de las empresas en el mundo tuvieron que adelantar su transformación digital para adaptarse a las exigencias del mercado actual.
Dentro de esa metamorfosis en el universo de los negocios entran en juego muchos aspectos, como la nube, la ciberseguridad y los centros de datos. Sin embargo, hay uno que está cobrando mayor relevancia: la hiperautomatización, que es la fusión armoniosa de automatización robótica de procesos (RPA, en inglés) e inteligencia artificial (AI, en inglés).
“Cuando hablamos de RPA nos referimos a los robots de software que emulan lo que haría una persona en las distintas plataformas: mandar un correo a una base de datos o preparar un reporte en Excel. Es decir, procesos repetitivos y estandarizados”, explicó Octavio Camarena, Director de KIO Application Management, quien agrega que la AI utiliza diferentes algoritmos y fórmulas para analizar e identificar patrones y correlaciones, con el objetivo de detectar anomalías y/o entender tendencias y comportamientos basados en la data, entre otras funciones.
Por eso mismo, la automatización pura es aplicable a cualquier tipo de empresa -micro, pequeña, mediana y grande-. El único requisito es que tenga procesos repetitivos y estandarizados, así como información digitalizada y bases de datos. Por otro lado, la inteligencia artificial es recomendable para aquellos negocios con mayor madurez tecnológica.
“Lo cierto es que actualmente la mayoría de nosotros estamos en contacto con la hiperautomatización. Por ejemplo, esos chatbots con los que interactuamos en las páginas de los bancos u otro tipo de empresas”, afirmó Camarena.
La implementación de la hiperautomatización en una corporación debe ser parte primordial de la estrategia de transformación digital, ya que es una herramienta que garantiza la innovación y el liderazgo. Esta tecnología hace que los negocios se vuelvan infalibles, eficientes, resilientes y veloces. Además, garantiza una inversión económica más efectiva y ágil, con resultados medibles en cuanto a costo y beneficio.
De acuerdo con Camarena, la hiperautomatización está al alcance de cualquier empresa, pues los servicios se pueden rentar bajo demanda y según las necesidades de cada cliente. Es decir, se paga por el tiempo de uso, el cual puede ser por año, mes, semanas, días o, incluso, horas.
“En todas las organizaciones se ejecutan acciones manuales que se pueden automatizar”, agregó.
El mundo actual necesita que la tecnología ayude a empoderar al ser humano y no lo va a reemplazar. Y ese es el principal valor de la hiperautomatización, pues permite que las personas se enfoquen en tareas más estratégicas, creativas y analíticas, mientras que los softwares ejecutan los procesos repetitivos.
“Esta es una fórmula efectiva para marcar la diferencia con la competencia y lograr liderazgo e innovación en el mercado”, concluyó Camarena.
Por último, es conveniente recordar el impacto económico que tendrá esta herramienta. Según Gartner, la hiperautomatización alcanzará este año inversiones por arriba de los US$532,400 millones a escala global, una cifra que podría superar los US$590,000 millones en el 2022.
