*Foto de portada vía Gustavo Chaves
Es lamentable que muchos niños tengan que escoger entre comer todos los días o asistir a la escuela. Este solía ser el caso de los hermanos Janailton y Janilson, quienes vendías verdura en la carretera de Alagoa Grande, Brasil, para conseguir un poco de dinero y ayudar a su padre.
Janailton, de nueve años, y Janilson, de siete, vivían junto a su padre, Adimildo da Silva, en una pequeña casa de barro sin luz y agua potable. A pesar de que pasaban horas bajo el sol tratando de vender verdura, a veces solo comían una vez al día.
Adimildo, quien trataba de hacer lo mejor que podría luego de que su esposa los abandonara, solo podía trabajar medio tiempo para poder cuidar a sus hijos.
Sin embargo, un día su vida cambió para siempre gracias al enorme corazón de un reportero, Gustavo Chaves, quien se conmovió al ver a los hermanitos vendiendo verdura en lugar de estar en la escuela.
Chaves comenzó una campaña para recaudar fondos y ayudar a esta familia. Gracias a la bondad de muchas personas, Janailton y Janailson han podido inscribirse a la escuela y su padre logró comprar material de construcción para la casa, que ahora cuenta con cocina y agua potable. Incluso logró comprarse una moto para poder transportarse.
Es increíble cómo tan solo un acto de bondad puede impactar enormemente a las personas por el resto de sus vidas. Cuando tengamos la oportunidad de ayudar, no lo dudemos y actuemos.