¿Los alimentos etiquetados como «sin ácidos transgrasos» en realidad pueden contener contener ácidos transgrasos nocivos? Un alimento puede etiquetarse como “sin ácidos transgrasos” o que “no contiene ácidos transgrasos” cuando contiene menos de 0.5 gramos de ácidos transgrasos por porción.
Aunque parece insignificante porque la cantidad de ácidos transgrasos es muy pequeña, se debe ser realista en cuanto a las porciones. ¿Puedes comerte una sola galleta o no puedes resistirte a comer toda la bolsa? Las galletas de sal, por ejemplo, contiene 0.4 gramos por porción y si el contenido del paquete es de 10 porciones, estarías consumiendo 4 gramos de ácidos transgrasos en total si te comes todo el paquete.
Los ácidos transgrasos pueden aumentar el riesgo de enfermedad cardiovascular, incrementar los niveles de colesterol por la lipoproteína de baja densidad (LDL) y disminuir los niveles de colesterol por la lipoproteína de alta densidad (HDL).
La Organización Mundial de la Salud recomienda limitar los ácidos transgrasos a menos de 1% del total de calorías. Por lo tanto, si consumes 2000 calorías diarias, eso significa que máximo 20 de esas calorías deben provenir de los ácidos transgrasos. Eso se traduce en menos de 2 gramos diarios, lo que fácilmente se encuentra en una pequeña cantidad de dulces o golosinas.
¿Qué son los ácidos transgrasos?
Se crean cuando se añade hidrógeno a los aceites vegetales, a través de un proceso llamado hidrogenación. Estos son ingredientes comunes de la repostería comercial, como las galletas de sal, los pasteles y las galletas de dulce, y se emplean muy a menudo en los alimentos fritos. Algunas mantecas vegetales y barras de margarina contienen ácidos transgrasos.
A fin de evitar los ácidos transgrasos, es importante leer la lista de ingredientes y escoger alimentos que no contengan aceites parcialmente hidrogenados.
Esta información fue brindada por Katherine Zeratsky, Especialista en dietética, Endocrinología y Nutrición de Mayo Clinic en Rochester, Minnesota.