Una persona fumadora de tabaco no solo se perjudica a si misma, sino a todos los que conviven con esta convirtiéndose estos a largo plazo en fumadores pasivos.
Esto trae como consecuencia graves daños a la salud pero no solo de las personas que conviven con la persona sino también pueden verse afectadas las mascotas en el hogar.
¿Les afecta de igual modo
Un estudio publicado por la Universidad Tufts en Massachusetts expone la probabilidad de que una mascota pueda enfermar o morir por el hecho de ser al igual que las personas, fumadores pasivos. Este estudio afirma que las mascotas al convivir en un entorno de este tipo pueden llegar a desarrollar cánceres nasales, pulmonares, linfáticos así como problemas de la piel o la vista.
Los perros son los que más sufren por el humo del cigarrillo. Estudios confirman que un perro que convive con fumadores muy activos tiende a desarrollar cáncer de pulmón en 1 de cada 2 ocasiones. En caso de perros con hocico largo y grande, la probabilidad de desarrollar cáncer oral es incluso mayor.
Los gatos también son afectados por tumores malignos, si bien su incidencia es menor. Aún así, son frecuentes los linfomas en gatos, especialmente los linfomas orales que tienden a desarrollar cuando estos se lamen su propia piel, cubierta por las sustancias tóxicas y cancerígenas del humo del tabaco.
Con esto en mente, ¿estarías dispuesto a dejar el tabaco por la salud de tu mascota y de las personas a tu alrededor?.
Hoy 31 de mayo que se celebra el Día Mundial sin Tabaco podría ser una oportunidad de tomar consciencia.