Hoy en día, los dispositivos médicos comestibles como las pastillas con cámara y otros son una realidad y pueden ayudar a diagnosticar enfermedades con mayor precisión.
Sin embargo, para que esta tecnología pueda expandirse, es necesario que no signifique un peligro para el organismo. Con esto en mente, un equipo de investigadores han desarrollado una batería no tóxica que proporciona la energía suficiente para alimentar los dispositivos comestibles, hasta por 18 horas.
El equipo de investigadores pertenecen a la Universidad Carnegie Mellon en Pittsburgh, Estados Unidos y estos han desarrollado esta batería, ya que aseguran que estos dispositivos no son del todo seguros porque contienen materiales tóxicos que podrían quedarse atrapados en el cuerpo y causar daños a las personas.
La batería creada por estos investigadores resolvería ese problema, ya que está construida con materiales naturales que no son dañinos para el organismo. Para ello utilizaron pigmentos de melanina, los cuales se encuentran en la piel, cabello y ojos.
El diseño de esta batería permite que esta se mueva por dentro del cuerpo sin ningún problema y si es el caso pueda ser eliminada del sistema sin causar daños. Actualmente los investigadores está buscando socios de la industria para llevar la misma al mercado.